Es importante tener controlados tanto los gastos fijos que se tienen en casa como los «gastos hormiga», que son aquellos que poco a poco consumen el presupuesto mensual de los hogares.
Para ello puedes usar, por ejemplo, una hoja de cálculo en la que registres los ingresos y los gastos fijos que debes afrontar, los gastos variables y los posibles imprevistos que puedan surgir.
De esta manera podrás hacer un mejor seguimiento del dinero del que dispones para contratiempos o estudiar de dónde puedes recortar gastos para invertir en otros menesteres. En total, una buena planificación de los gastos de un hogar puede permitir ahorrar, de media, 2.471 euros al año.